Piel con acné

El acné es un problema muy común, y su aparición puede deberse a diferentes motivos, como la producción de sebo en exceso, el estrés, por causas hormonales o por falta de limpieza en la piel. En adultos también puede deberse a la acumulación de toxinas en sangre y en adolescentes normalmente se produce por una hipersecreción sebácea.

Además de las hormonas andrógenas, el acné se produce por un exceso de sebo, por sobrecarga en los órganos de eliminación, alteración del ph de la piel, alimentación insana, cosmética agresiva y por estrés. Cuando el poro queda obstruido por el exceso de grasa y las células muertas, la falta de oxigenación provoca que las bacterias que tenemos de forma equilibrada en nuestra piel proliferen en exceso y provoquen, si es de cabeza abierta, el conocido punto negro y si la cabeza es cerrada, el grano precursor de las lesiones inflamatorias del acné.

El tratamiento indicado para este tipo de problemas consistirá en:

  1. Limpiar día y noche tu piel con un limpiador suave para eliminar la suciedad, el aceite y las células muertas de la piel que pueden obstruir los poros y causar acné.

  2. Tonificar la piel tras la limpieza para retirar residuos y cerrar el poro.
  3. Proteger tu piel de la exposición al sol. Aunque te encuentres en sitios cerrados o esté nublado un protector solar no comedogénico protegerá tu piel tanto de la exposición solar como de las impurezas ambientales.
  4. Exfoliar regularmente para ayudar a eliminar las células muertas de la piel que pueden obstruir los poros y causar acné. 

  5. Hidratar tu piel. La hidratación es importante para mantener tu piel sana y prevenir la producción de sebo excesivo que puede causar acné. Usa una crema hidratante suave y no comedogénica para mantener tu piel hidratada.

A continuación te ofrecemos distintas posibilidades para poder llevar a cabo la rutina indicada. Elige el producto que más se adapte a tus necesidades:

  • LIMPIEZA
    • Agua Micelar Sólida con ácido salicílico: la combinación del agua micelar que limpia en profundidad impurezas y sebo, y el ácido salicílico (se extrae de la corteza del sauce) que elimina las células muertas y las impurezas que obstruyen los poros, deja la piel completamente limpia y fresca sin agredirla y ayudando a combatir los signos del acné.
    • Gel Limpiador Facial con Ácido Hialurónico y Granada: limpia en profundidad sin resecar, dejando una piel hidratada, suave y luminosa. Ayuda a regular el sebo y reduce los poros dilatados.
    • Loción Limpiadora y Desmaquillante 100% Bio: gracias a las moléculas densas del aceite, arrastra la suciedad y el sebo, dejando la piel jugosa y elástica. Apta para todo tipo de pieles incluidas las grasas, ya que el aceite de la fórmula ayuda a retirar el sebo sobrante de la piel y el agua de rosas hidrata y ejerce un efecto astringente.
    • Limpiador facial sólido piel grasa: gracias a la arcilla verde limpia en profundidad secando la grasa sobrante, el pomelo actúa como bactericida y el resto de aceites permiten que la piel no se queda áspera y seca. El aceite de neem acabará con cualquier rastro de la bacteria causante del acné.
  • TONIFICACIÓN:
    • Tónico calmante y seboregulador pieles grasas y acnéicas: gracias a su composición en salvia, levadura, agua de bardana y de ortiga blanca y sales minerales del mar muerto, regula la producción de grasa, regula el pH de la piel, disminuye el acné y ayuda a cerrar poros abiertos. Es ideal para pieles con acné o rosácea, ya que disminuye la rojez inmediatamente y calma la piel. 
    • Tónico purificante 100% Bio: tónico con efecto astringente, cierra los poros y regula la producción de sebo. Equilibra la piel y la deja fresca y tonificada. 
  • HIDRATACIÓN:
    • Crema reparadora acné y pieles sensibles: ideal para pieles sensibles y reactivas (rojeces, dermatitis…) e incluso con brotes de acné. Por sus propiedades calmantes y emulgentes, trabaja en el equilibrio de la secreción de grasa, es seborreguladora. También tiene propiedades regeneradoras, ayudando a la cicatrización de las marcas en la piel.
    • Crema hidratante y seboreguladora para pieles grasas-mixtas: crema hidratante, purificante y sebo-reguladora para pieles grasas-mixtas y/o con tendencia acnéica. Gracias al ácido glicólico y al ácido salicílico, realiza una ligera exfoliación, eliminando las células muertas de forma suave y aumentando la renovación celular. Regula el exceso de sebo, cierra poros y reduce la aparición de acné y sus marcas. Ayuda a matificar los brillos de la piel.
    • Crema retinol, antimanchas, antiacné y antiarrugas: muy recomendada en pieles con acné y marcas de éste, ya que realiza una exfoliación y regeneración desde las capas más internas de la piel y regula el exceso de sebo.
    • Suero facial pieles acnéicas: concentrado de acción antiséptica, antiinflamatoria, drenante de lípidos y fuente de vitamina A y E.

      Tiene propiedades antibacterianas y calmantes. Tonifica, descongestiona y regenera las pieles con tendencia acnéica.

    • Sérum antioxidante con niacinamida: la niacinamida es el aliado ideal en el cuidado de la piel acnéica y para fortalecer los procesos de reparación de la piel reduciendo el daño celular causado por los rayos ultravioleta y combatiendo así los efectos del envejecimiento tales como la hiperpigmentación.
  • PROTECCIÓN SOLAR: 
    • Protector solar facial SPF50 Bio: crema solar con filtros 100% minerales, resistente al agua, y respetuosa con los océanos. Con óxido de zinc no-nano, de fácil absorción, que no deja la piel blanca. Protege de los rayos UVB y de los rayos UVA. Indicada para todo tipo de pieles.
    • Protector solar Age Defense SPF50+  (con y sin color): crema protectora con filtros minerales de amplio espectro frente a los rayos UVA, UVB, IR y HEV (luz azul) y con acción antiarrugas y anti-agigEstá indicado en todo tipo de pieles, incluidas las pieles grasas y con tendencia acnéica, o para las pieles hipersensibles, ya que ayuda a calmar la piel.
  • EXFOLIACIÓN: 
    • Mascarilla facial exfoliante de té verde, aguacate y aloe vera: exfolia las células muertas y purifica la piel, gracias las pequeñas partículas de arroz. Regula el exceso de sebo y reduce los poros dilatados. Calma las pieles enrojecidas y restaura las dañadas por su concentración en niacinamida y genciana. Muy recomendada en pieles grasas y mixtas con tendencia acnéica.
    • Exfoliante sólido facial: combina la suavidad de los aceites ecológicos de almendra dulce y jojoba con las propiedades exfoliantes del polvo de cáscara de nuez y las hojas secas de verbena. Purifica la piel y revitaliza el cutis.